Astavakrasana
Postura de los ocho ángulos
Astavakrasana
(Postura de los ocho ángulos)
Posición Inicial:
Comienza en una posición sentada en el suelo, con las piernas extendidas hacia adelante (Dandasana). Dobla la rodilla derecha y lleva el pie derecho hacia el suelo, cerca de la cadera izquierda. Pasa el brazo derecho por debajo de la pierna derecha, colocando la mano derecha en el suelo al lado de la cadera.
Alineación del Cuerpo:
Piernas: Cruza el tobillo izquierdo sobre el derecho y engancha los pies, manteniéndolos flexionados.
Brazos: Coloca las palmas de las manos firmemente en el suelo, a la altura de las caderas, con los dedos apuntando hacia adelante. Inclina el torso hacia adelante y usa la fuerza de los brazos para levantar las caderas del suelo.
Estiramiento y Flexión:
Elevación y Equilibrio: Mientras levantas las caderas del suelo, estira las piernas hacia la derecha, manteniéndolas firmemente enganchadas. Usa la fuerza del core para mantener las piernas elevadas y alineadas con el torso.
Torso y Hombros: Gira el torso ligeramente hacia la izquierda y mantén los hombros alineados y fuertes, evitando colapsar en el pecho.
Respiración Profunda:
Mantén una respiración profunda y constante mientras sostienes la postura. La inhalación ayuda a mantener la longitud y la fuerza en el torso, mientras que la exhalación te permite profundizar en la postura y mantener el equilibrio.
Músculos Implicados:
Músculos del Core:
Abdominales: Los músculos abdominales se activan intensamente para mantener la estabilidad y el equilibrio.
Oblicuos: Trabajan para mantener la torsión y la alineación del torso.
Músculos de los Brazos y Hombros:
Tríceps y deltoides: Los brazos soportan el peso del cuerpo y ayudan a mantener la postura.
Pectorales: Ayudan a estabilizar los hombros y el pecho.
Músculos de las Piernas:
Aductores: Los músculos internos del muslo trabajan para mantener las piernas enganchadas y elevadas.
Cuádriceps y isquiotibiales: Mantienen las piernas estiradas y alineadas.
Músculos de la Espalda:
Erectores espinales: Ayudan a mantener la longitud y la alineación del torso.
Dorsales: Contribuyen a la estabilidad y la fuerza en la parte superior del cuerpo.


Beneficios:
La postura de los Ocho Ángulos mejora la fuerza y la flexibilidad en el core, los brazos y las piernas. Desarrolla la coordinación y el equilibrio, y aumenta la conciencia corporal. Practicar Astavakrasana regularmente fortalece los músculos abdominales y los hombros, mejora la estabilidad del core y fomenta una mayor concentración y enfoque mental. Además, esta postura desafiante puede contribuir a una mayor confianza en la práctica del yoga y en la capacidad del cuerpo para realizar movimientos complejos y equilibrados.

